La mediación es un sistema de resolución de conflictos en la que interviene un tercero que ayuda a las partes a llegar a un acuerdo. Podríamos decir que es una negociación asistida, por un tercero neutral e imparcial, que facilita la comunicación e intenta acercar los intereses de las partes para que sean ellas las que lleguen a un acuerdo.

Tanto en su versión presencial u online, las partes del conflicto tienen un papel activo y protagonista en el proceso, se hablan y se escuchan de forma respetuosa y colaborativa con la ayuda de un mediador, quien analiza y determina el alcance del conflicto para guiarlas de forma activa en la búsqueda de posibles soluciones consensuadas.

El mediador es el que dirige y guía el proceso de forma flexible y las partes mantienen su poder de decisión y pueden estar acompañados y asistidos por sus abogados.

La mediación permite reducir tiempo, recursos y costes, preservar las relaciones de futuro y lograr acuerdos beneficiosos que supongan un valor añadido.

Ofrecemos mediación online, de forma virtual, en la que el mediador y las partes utilizan medios electrónicos para comunicarse en lugar de que sea un proceso presencial.

Las ventajas de la mediación online respecto a la presencial se basan, sobretodo, en el ahorro de tiempo y en la posibilidad de su realización en cualquier momento y desde casi cualquier lugar. El único requisito es disponer de un aparato electrónico con cámara, altavoz, micrófono y acceso a internet. Del resto, nos encargamos nosotros, adaptándonos a cada caso.

El potencial transformativo de la mediación puede encontrarse, también, cuando el proceso tiene lugar en la red. El proceso es mucho más importante que el medio a través del cual se desarrolla. Hay circunstancias en las que los procedimientos presenciales no son factibles o deseables por distintos motivos.

Es recomendable realizar las sesiones online cuando las partes se hallan lejos geográficamente, tienen incompatibilidad de fechas para reunirse presencialmente, no quieren coincidir físicamente en una misma reunión o existe un desequilibro personal entre ellas ya que la pantalla marca la distancia necesaria, empoderando a la parte débil.

Solo utilizamos medios electrónicos con unos estándares mínimos de seguridad y se garantizan escrupulosamente los principios que fundamentan la mediación, (voluntariedad, neutralidad, imparcialidad y confidencialidad).